Pocas lesiones son tan terroríficas y perturbadoras de la vida que las lesiones cerebrales. Pueden cambiar la personalidad de una persona, afectar su habilidad para moverse, trabajar o disfrutar de la vida, y en los casos más serios, matar. Y el daño puede ser insidioso –tomando meses, o incluso años, para volverse totalmente aparente.
Las lesiones cerebrales traumáticas pueden ocurrir en todo tipo de incidentes. Algunos de los más comunes incluyen:
- Accidentes de vehículos automotores (motocicletas, vehículos todo-terreno, automóviles, etc)
- Bicicletas, patinetas, patines, tablas de snowboard, y accidentes de ski
- Caídas y resbalones
- Accidentes de trabajo
- Asaltos y peleas
El problema es que aunque nuestro cerebro está guardado de forma segura en el armazón de nuestra cabeza, es aún un órgano suave. Y cuando usted sufre una sacudida o golpe repentinos en la cabeza, el cerebro puede literalmente ser golpeado contra la corteza dura. El daño resultante puede incluir:
- Moretones
- Sangrado
- Dolor
- Daño por sobre estiramiento a las fibras de los nervios en tejidos profundos debido a una lesión por latigazo cervical (lesión axonal difusa)
- Fuerza de choque o presión de onda, como en el caso de los veteranos que sobreviven explosiones
- Fracturas penetrantes y desplazadoras del cráneo
- Temblor severo, como en el síndrome del niño sacudido
¿Qué tipo de daño puede causar una lesión cerebral?
Los efectos de una lesión cerebral pueden ser extensivos y profundamente inhabilitantes. Incluso con una lesión media, pueden incluir dolor de cabeza, confusión, mareo, sensibilidad al ruido o luz, timbrado en los oídos, visión borrosa o doble, ausencia de descanso e insomnio. Lesiones más serias pueden resultar también en:
- Discapacidades físicas, pérdida de control motor, parálisis
- Convulsiones y ataques
- Nausea persistente o vómito
- Problemas de habla
- Pérdida de coordinación
- Problemas para pensar con claridad y juicio disminuido
- Asuntos emocionales y de conducta, como depresión y agresión
- Cambios de personalidad
- Muerte
La recuperación para una víctima de lesión cerebral puede tomar años, y algunas no vuelven a ser su “antiguo yo”
Enfrentando los retos
Como usted puede imaginar, las lesiones cerebrales pueden ser extremadamente difíciles para las víctimas y sus familias –
Emocionalmente, físicamente, y financieramente. Hay un riesgo real para las familias de que la rehabilitación requiera pagos más allá de los seguros. Y de que la víctima nunca pueda trabajar como lo hizo alguna vez, o recuperar sus antiguas habilidades.
Para muchos, eso significa que la única forma en que pueden obtener la atención que requieren es presentar una demanda por lesiones personales contra la parte o partes responsables de la lesión.
Si usted o algún ser querido ha sufrido una lesión cerebral, sería inteligente hablar sobre sus opciones con un abogado de lesiones personales experimentado en procesar demandas por lesión cerebral.
Para procesar una demanda por negligencia, el abogado tendrá que demostrar que las acciones u omisiones de terceros fueron de alguna forma responsables por el accidente y sus lesiones. Su abogado combatirá para asegurarse de que usted obtenga una compensación completa y justa para sus necesidades de corto y largo plazo, incluyendo:
- Gastos médicos
- Rehabilitación
- Pérdida de ingresos
- Dolor y sufrimiento
- Daños emocionales
- Daños punitivos
La recuperación de una lesión cerebral requiere tiempo, recursos financieros y el apoyo de un equipo de expertos médicos y de rehabilitación. Un abogado especializado en lesión cerebral puede ayudarle a asegurarse que tenga acceso a dicho equipo tanto tiempo como lo necesite.